Ignifugación: una medida para salvar vidas
Son muchas las circunstancias que pueden surgir inesperadamente, y las consecuencias que provienen de ello. Sin embargo, aunque no se puede prever cada posibilidad, si es posible evitar algunas, como los incendios, a través procedimientos tales como la ignifugación.
En términos generales, hay múltiples medidas que se deben tener en cuenta para evitar, mitigar o detener los accidentes, y en el peor de los casos, alternativas para alejarse del peligro si todo lo demás falla.
Y esto es doblemente cierto si se trata de un fuego, pues al contrario que los desastres naturales, como terremotos o tornados, solamente se necesitan tres factores para que un incendio comience y se propague, devorando todo a su paso.
Pero más allá de la educación para prevenir estos terribles incidentes, la edificación misma debe estar protegida para asegurar la tranquilidad de los que estén allí presentes. Los aspectos que esto abarca son:
- Las vías de emergencias son obligatorias en todo edificio, y aparte de tener dimensiones mínimas obligatorias, los materiales con los que está construido el techo, las paredes y el suelo deben ser o estar recubiertas de materiales incombustibles. Se requieren también escaleras presurizadas y puertas cortafuego.
- Detección y alerta. Mediante mecanismos manuales o automáticos se puede avisar de cualquier conato de incendio. Tras ello, se utilizan letreros lumínicos para indicar el riesgo y los caminos para evacuar. Así mismo, algunos sistemas llaman electrónicamente al cuerpo de bomberos inmediatamente.
- Extinción. Se emplean agentes extintores para eliminar cualquiera de los elementos que mantienen vivo un fuego: el combustible, calor u oxígeno. En el caso del primero, únicamente se logra aislando las llamas, de manera que no se extiendan a otros objetos. Usualmente se usa agua para el segundo, mientras que otras sustancias eliminan el oxígeno en contacto directo.
Si el lugar no fue construido de la forma idónea, o hay mucho material inflamable, la mejor acción a tomar es darle un recubrimiento ignífugo, ganando tiempo adicional que podría salvar una o varias vidas. Además, se debe educar a los inquilinos para que sepan cómo reaccionar en estos momentos y mantenerse a salvo, sin importar que ocurra.