La pizarra en la enseñanza

La pizarra es todo un clásico en la enseñanza. Es uno de los elementos pedagógicos que ha sobrevivido con éxito al paso de los años y a los cambios en los métodos de enseñanza. Y es que aunque la pizarra electrónica se ha puesto de moda y está dando excelentes resultados en la escuela, ésta sigue conviviendo con la pizarra de toda la vida o sus variantes más modernas las pizarras blancas aptas para alérgicos al polvo, ya que el rotulador sustituye a la clásica tiza.

¿Qué ventajas ofrece la pizarra de toda la vida para la educación?

1.Permite que todos los alumnos vean desde cualquier parte del aula las explicaciones.

2.Ayuda tanto al profesor como al alumno a seguir mejor la explicación oral.

3.Sirve como apuntes para los alumnos.

¿Qué ventajas ofrece la ventaja interactiva para la educación?

1.Ofrece novedad a la clase, lo que hace que muchos de los alumnos se motiven mucho más. Ideal para los más inquietos o desmotivados.

2.Ayuda a que los alumnos no solo aprendan la lección sino a manejar las nuevas tecnologías desde que son muy pequeños.

¿Por cuál optar?

Sin duda ambas. Cada una en su momento. Nuestra recomendación es no utilizar ni la una ni la otra en exclusividad ya que si por ejemplo utilizamos la digital en exceso los alumnos terminarán por verla como un elemento novedoso y divertido; si por el contrario solo usamos la pizarra convencional los alumnos terminarán aburriéndose por ver en ella un reflejo de nuestras clases siempre tan… típicas.

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