Principales ventajas de la virtualización
¿Virtualizarse o no virtualizarse? Puede que esta no sea la cuestión que debe de plantearse una empresa en muchos de sus procesos y sistemas informáticos, puede que la cuestión concreta y deseable sea la de decirse: virtualizarse no es una opción, es una necesidad, la clave entonces está en saber como nos virtualizamos.
Virtualizar una empresa, entendido dentro del ámbito del cloud computing y virtualización, significa virtualizar, “poner en la nube”, el escritorio de nuestra compañía. Eso es virtualizar nuestros recursos de almacenamiento, red y por supuesto el disponer de forma completamente virtual de todo aquello relacionado con las TIC que nos permita digamos coloquialmente operar con nuestra empresa sin tener porque estar en nuestra empresa, entre otras consideraciones al respecto que podríamos realizar.
Entonces llegados a la conclusión y convencimiento que el asunto no se dirime en sí virtualizarse o no virtualizarse sino en el “cómo” virtualizarse hemos de tener algunas consideraciones muy claras al respecto, pero una de ellas debe de primar ante todas las demás: la calidad debe de ser innegociable.
La calidad ante todo, una calidad que debe de ir sustentada y relacionada con un servicio de primer nivel, un servicio que permita una respuesta técnica eficaz y permanente. A la vez debe de ir relacionado con una propuesta que permita disponer siempre de la más avanzada y mejor tecnología a nuestra disposición, y por supuesto con la necesidad de que disponga de una infraestructura, de una estructura que soporte todo ello de primer nivel.
En resumidas cuentas, virtualizar nuestra empresa es un imperativo si deseamos estar al día empresarialmente y resultar competitivos y eficaces, pero dependiendo de cómo nos virtualicemos, y sobre todo de con quien nos virtualicemos los resultados que obtendremos serán unos u otros bien diferentes.